A casi tres años de su última presentación, Babasónicos regresó al Paraguay para hacer lo que más les gusta: reinventarse en una fiesta en donde el rock, la fuerza y la frescura siempre gozan de buena salud.

Por Jorge Coronel

En una entrevista exclusiva, hablamos con Adrián «Dárgelos» Rodríguez, voz y líder de una de las bandas más imprescindibles del rock en español.

Adrián «Dárgelos» Rodríguez es el vocalista de Babasónicos, banda que se inicia en la frenética escena del rock argentino a principios de los ’90. Pasto, su primer disco, fue editado por Sony Music y contó con la participación de Gustavo Cerati y Daniel Melero; habiendo sido elegidos para presentarse como teloneros de Soda Stereo primero; y de Depeche Mode después.

Desde aquellos tiempos han pasado casi 20 años, y a juzgar por los resultados: a meses de editar A Propósito (a editarse en mayo de este año), disco de estudio número diez, han logrado reinventarse constantemente hasta lograr posicionarse en la cumbre de la escena del rock en nuestro idioma.

El segundo aniversario de Cover Singing Bar –celebrado el pasado 2 de abril en el Casco Antiguo del centro de Asunción– fue el momento propicio para concretar el reencuentro con un público paraguayo que gusta degustar de un excéntrico rock que logra despertar pasiones a lo largo y ancho del continente. Y más allá también.

En una entrevista exclusiva, hablamos con Dárgelos y hubo lugar para todo. De la esencia, transición y evolución del sonido deBabasónicos; de la apuesta del nuevo álbum; del proceso compositivo grupal; de la presencia en las redes sociales y más. Una verdadera charla de rock en la que el músico nos regaló sus palabras; y desplegó tanta épica como la que desdoblan sus canciones.

-A meses de cumplir 20 años como banda conservan intacta la virtud de mantener la frescura y espontaneidad en la estética y concepto de las canciones, discos y shows en vivo. ¿Son los Babasónicos algo así como los Supersónicos del rock?

-El gran reto en una música que no tiene parámetros, como es el rock, que es una música más emocional que cerebral; más –como vos decís– de alto contenido de frescura y explosión. El rock, por su definición es una música hecha por jóvenes sin filtros que trata de incomodar también, ¿no? Es una música que marca un abismo generacional entre tus padres y vos, y entre vos y los que siguen también.

Creo que el gran reto es ese: no ganar certezas y poder atravesar el tiempo siendo un hombre al que todavía le quedan cosas por descubrir permanentemente y que todavía toma riesgos; y que en esos riesgos siente el vértigo de lo inesperado; y busca, busca y busca lo nuevo.

Creo que gran parte del milagro que se da en nosotros es que hemos crecido juntos los cinco integrantes que quedan –porque uno falleció–. Y han podido atravesar esto competitivamente para que el crecimiento los acompañe y mantengan en claro hacia dónde van, cómo preservar la frescura y la fuerza que venden. Es algo que no lo podríamos haber previsto ni premeditado; que es una situación que se dio espontáneamente con la conjunción de nuestras personas, y que han sumado un carisma mayor que es el carisma de Babasónicos; que es mayor a nuestros carismas individuales. Entonces es una situación impredecible, casi mágica, que se nos dio sea con la casualidad, suerte, azar.

Leé la entrevista completa en ABC Color.