La banda estadounidense The Ocean Blue regresa al país en junio como parte de la grilla del Kilkefest. El vocalista y guitarrista David Schelzel habla de música y de su romance con el público paraguayo.

Por Jorge Coronel.

En junio de 2013 arribaban por primera vez al país, como bocanada de aire fresco para la agenda de conciertos en la capital. Tres años después, el encuentro se repite, esta vez para la segunda edición del Kilkfest. Originada en Hershey, Municipio de Derry, Pensilvania (EE.UU.), The Ocean Blue promete un repaso por distintos episodios de su repertorio, en el que seguramente no faltarán creaciones como Ballerina out of control, Between something and nothing y Drifting Falling.

Tras la edición de Ultramarine (2013) y la reedición digital y en vinilo de Waterworks (2004), su integrante David Schelzel adelantó a ABC Color que en el show del 4 de junio en el Casco Antiguo de Asunción (Palma y Hernandarias) habrá oportunidad para estrenar el corte de difusión, que formaría parte de un nuevo álbum.

En junio de 2013 se presentaban por primera vez en Paraguay, en un ambiente de verdadera algarabía. Qué les dejó aquella experiencia?

-Es genial escuchar sobre los fans… Tuvimos un increíble momento cuando estuvimos allí unos años atrás. Nos tomó por sorpresa. ¡Nos sorprendió saber que teníamos fans allí! Tienen un país hermoso, una rica historia y mucha gente maravillosa. Nos sentimos bienvenidos en momento en que llegamos al Paraguay, y la hospitalidad todo el tiempo que estuvimos allí fue excepcional. Los mejores recuerdos son la gente y los recorridos por Asunción.

-El año pasado relanzaron «Waterworks», en vinilo, diez años después de su lanzamiento original. ¿Cómo viven el resurgimiento del formato vinilo en los últimos años?

-Está bueno ver el regreso del vinilo… ¿Es popular en Paraguay? Tener algo más grande y que lo puedas tocar y mirar es hermoso… y hay algo maravilloso y cálido en el sonido del vinilo. También conseguimos lanzar un disco de larga duración (LP), agregando unas cuantas canciones más a la del EP original.

-¿Cuál es la canción más representativa del álbum?

-Lo más representativo de Waterworks probablemente sea Pedestrian y Sunshower. Ambas tienen nuestro sonido clásico, para mí…

-Las canciones de la banda -en general- transitan entre la nostalgia y la melancolía, sin perder de vista el optimismo y la alegría. ¿Consideras correcta esta apreciación? ¿Realmente se sienten así?

-¡Sí! Estoy de acuerdo… Todo eso me describe. Me siento una contradicción andante, a veces…

-También llegaron a visitar otros países de Latinoamérica, como Perú. ¿Qué sintieron de particular durante los shows en esta región del mundo?

-Nuestras visitas al Perú fueron increíbles. Algunos de los shows más excitantes que hicimos… Tuvimos muchos fans entusiasmados allí, que parecían conocer toda nuestra música. ¡Pero Paraguay está muy cerca!

-A las bandas indie de Sudamérica les cuesta bastante posicionarse dentro de los «cánones» de la industria musical, lo cual les suele complicar la promoción y difusión de su música. ¿Cómo lo viven ustedes, con tantos años de trayectoria?

-Pienso que siempre es difícil ser una banda indie… no importa de dónde seas. Es difícil que te presten atención, incluso si sos bueno. Lo mejor que podés hacer es enfocarte en lo que te divierte, y ser tan bueno como te sea posible. La gente notará si lo sos… y si debe ser, será.

 

Publicado en ABC Color el 27 de mayo de 2016.